Foto. 2005 Esculturas de la Fontana de Trevi"Lleva tiempo llegar a ser joven..." Picasso.
Que maravilla de película.
Esta producción Argentino-Española del 2005 tiene tanta tela , que no sabría por donde comenzar a cortar.
Dos ancianos se encuentran en los últimos años de su vida, bajo circunstancias diferentes , pero al fin con la empatía suficiente (no necesariamente en principio con las afinidades esperadas) como para entablar una relación emocionalmente afortunada.
De tal forma Elsa y Fred emprenden "la aventura" a los 80 años. Una aventura que comienza con el intercambio de información sobre lo que han sido sus vidas y finaliza haciendo realidad un sueño.
Porque la vida está llena de ellos , de sueños, mismo que están ahí para hacerlos realidad, y Elsa tenía un sueño perdido y Fred quiso hacerlo realidad a su lado.
Las actuaciones son extraordinarias, ya que logran cumplir con el fin último de una actor de categoría, esto es, transmitir sentimientos y estados de ánimo al espectador. Elsa y Fred nos llevan de la risa al llanto y entre cada uno de estas representaciones construyen el puente de la reflexión.
Las escenas se dejan caer en cascada y mientras Elsa nos hace reír cada vez que va manejando cual adolescente su pequeño automóvil escuchando a Joan Manuel Serrat, Fred cautiva a la dama y a los espectadores con sus formas y atenciones.
La cinta poco a poco nos va envolviendo en los anhelos de los personajes al tiempo que va dando forma a un final emotivo que nos remontará a la famosa Dolce vita de Fellini, en el que la Fontana de Trevi es testigo fiel de un incipiente amor , que no por ello deja de ser intenso y encantador.
Esta producción Argentino-Española del 2005 tiene tanta tela , que no sabría por donde comenzar a cortar.
Dos ancianos se encuentran en los últimos años de su vida, bajo circunstancias diferentes , pero al fin con la empatía suficiente (no necesariamente en principio con las afinidades esperadas) como para entablar una relación emocionalmente afortunada.
De tal forma Elsa y Fred emprenden "la aventura" a los 80 años. Una aventura que comienza con el intercambio de información sobre lo que han sido sus vidas y finaliza haciendo realidad un sueño.
Porque la vida está llena de ellos , de sueños, mismo que están ahí para hacerlos realidad, y Elsa tenía un sueño perdido y Fred quiso hacerlo realidad a su lado.
Las actuaciones son extraordinarias, ya que logran cumplir con el fin último de una actor de categoría, esto es, transmitir sentimientos y estados de ánimo al espectador. Elsa y Fred nos llevan de la risa al llanto y entre cada uno de estas representaciones construyen el puente de la reflexión.
Las escenas se dejan caer en cascada y mientras Elsa nos hace reír cada vez que va manejando cual adolescente su pequeño automóvil escuchando a Joan Manuel Serrat, Fred cautiva a la dama y a los espectadores con sus formas y atenciones.
La cinta poco a poco nos va envolviendo en los anhelos de los personajes al tiempo que va dando forma a un final emotivo que nos remontará a la famosa Dolce vita de Fellini, en el que la Fontana de Trevi es testigo fiel de un incipiente amor , que no por ello deja de ser intenso y encantador.
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