sábado, 30 de abril de 2005

ASIA, LA PRIMERA VEZ

And now you find yourself in '82….

En 1969 Eric Clapton, Ginger Baker y Steve Winwood formaron el primer súpergrupo del rock. Su nombre: Blind Faith.

13 años después se formaría un supergrupo de las mismas e incluso mayores pretensiones...su nombre Asia.

A lo largo de la historia del rock and roll ha existido un número importante de supergurpos, en diversas corrientes, pero al fin agrupaciones que han logrado alcanzar la gloria y la fama. Muchos de ellos alcanzaron el éxito de inmediato, otros tuvieron que esperar algunos meses e incluso años para afianzarse en el circuito de sus respectivos países de origen.

Por ello no es raro observar que las primeras grabaciones de muchos de ellos no eran capaces de vender más de una miles de copias y eso que ya por lo menos tenían la posibilidad de grabar uno. Por ende, algunos de nosotros descubrimos a los grupos vía –lógico- la última grabación ó el mayor éxito comercial, para posteriormente adentrarnos en la historia –de atrás para adelante- de la banda elegida.

Sin embargo son contados en una mano los grupos que antes de nacer ya eran llamados supergrupos. Blind Faith fue un caso y Asia fue el otro.

La razón es que en su momento histórico cada una de ellas fue conformada por músicos que habían alcanzado la consagración en sus respectivas agrupaciones y además por calidad individual eran reconocidos dentro de la élite de músicos virtuosos y exquisitos del rock mundial.

Cada uno de ellos había disfrutado de las mieles del reconocimiento aunque como en alguna entrevista lo comentó Jon Anderson del grupo Yes “no éramos de las bandas que vendían millones de copias ó editábamos sencillos como lo hacían Journey o Foreigner”...quizá no del éxito comercial masivo.

Los orígenes

La formación de Asia nos remite inevitablemente a la corriente llamada Rock progresivo de mediados de la década de los setenta con base en la Gran Bretaña y de cuyas semillas surgieron los músicos más distinguidos de la época.

De acuerdo a una vieja revista española que definía perfectamente los orígenes del progresivo, desde el nacimiento del sintetizador obra de Robert Moog y hasta los entonces experimentales sonidos de Brian Eno, la corriente se apalancó en tres maravillosas agrupaciones.

El primer capítulo es dedicado a Genesis y sus primeras cuatro grabaciones con Peter Gabriel. Las puestas escénicas que abrieron las posibilidades de los conciertos en directo a cargo de esta importante banda. Menciona la salida de Peter Gabriel y la transferencia a las vocales del hasta entonces baterista Phil Collins.

El segundo capítulo se refiere a Yes, la banda inglesa que debutó en el afamado Royal Alberthall de Londres en la despedida de Cream. El capítulo versa en torno a sus constantes cambios de personal hasta llegar a la formación de 1974 y su grabación del l.p. Relayer.

El tercer capítulo va encaminado a la revisión del trío Emerson, Lake and Palmer, los referentes personales de cada uno de sus integrantes y la capacidad que tenían para adaptar obras de música clásica bajo un estilo denominado Rock Sinfónico.


En los capítulos finales se menciona a King Crimson de la mano de Robert Frip y por alguna razón no mencionan a Pink Floyd.

De cualquier forma el documento nos da un buen panorama de lo que fue la corriente fina del rock a lo largo de la década de los 70’s, el Rock progresivo. Ya sea asociada al jazz –en el caso de Yes- ó a la música clásica –E,L&P- , pero de alguna manera siempre ubicada un paso adelante en cuanto a calidad y expresión.

A lo largo de los 70’s la corriente pudo sortear fenómenos antagónicos como el Punk ó la música Disco, pero al arribar los 80’s estas bandas se encontrarían frente a verdaderos dilemas; algunas decidieron por la desintegración y otras por el cambio de estilo, algo que para muchos hirió de muerte a la corriente.

Los 80’s

Estamos en el umbral de una nueva década.

Las corrientes New Romantic y el Heavy Metal están preparadas para dominar los próximos diez años...

Lo pioneros tendrán que adaptarse a los nuevos tiempos ó tendrán que retirarse del negocio.

En estos momentos Queen es quizá la banda más grande de la tierra, U2 está iniciando un camino exitoso y una canción refleja lo que será el futuro próximo de la música. Video Kill the Radio Star, de los hasta entonces desconocidísimos Buggles.


Para el Rock progresivo no hay buenas noticias.

Yes perdía para 1980 a dos elementos fundamentales (Jon Anderson y Rick Wakeman) y los sustituiría para sorpresa de muchos por el par de The Buggles (Trevor Horn y Geoff Downes). Genesis iniciaba su transición hacia el pop con el L.P. Duke, y la influencia de Mr. Collins. E,L&P estaba desintegrado desde hace un año (79) y King Crimson trataba de sacar la cara con un álbum de nombre Beat, más electrónico que progresivo. El Floyd desde luego comercializando a más no poder The Wall.

Para 1981 Yes no resistiría más y tras la grabación del album Drama y un último sencillo de nombre Run through the Light – de enorme significado para el autor- , en 1981, otro dinosaurio progresivo entregaría su último aliento.

Definitivamente los 80’s parecían no traer buen augurio para la corriente progresiva, no así para algunos de sus integrantes.


De las cenizas de Yes y E,L&P....surge Asia.

El panorama no era el mejor pero siempre hay un tío que sabe sacar provecho ante situaciones adversas...ese tío se llamaba Brian Lane, quien a lo largo de los últimos años había sido manager de Yes y se mantendría como manager de Steve Howe. –conocido guitarrista de Yes para algunos de ustedes-

Brian Lane de acuerdo a las biografías oficiales que he podido leer fue quien le propuso a Steve Howe formar un nuevo grupo. Poco a poco las piezas irían juntándose.

En principio Steve Howe insistió en que el tecladista Geoffrey Downes se mantuviera a su lado, ya que la química entre ellos había dado por resultado grandes momentos en la grabación de Drama.

John Wetton quien recientemente había estado tocando en un grupo llamado UK junto a Eddie Jobson y Terry Bozzioy y previamente con Roxy Music así como con en el grandioso King Crimson a mediado de los 70’s fue contactado, por Brian Lane y de inmediato consideró esta posibilidad. John Wetton era una de las voces más finas del Rock Inglés y un excelente bajista.

Para la posición de batería, Brian Lane había originalmente pensado en Simon Phillipps, pero afortunadamente para los fans consideró a Carl Palmer quien estaba buscando grupo tras la desintegración de Emerson, Lake & Palmer.

¡ De tal forma, para iniciar 1982, Asia estaba preparado para dominar al mundo ¡

jueves, 21 de abril de 2005

THE FINAL CUT / 21.04.05

A.Castillo: 37 years: 13505 days: 324120 hours

Que sucedería si al momento de nuestra muerte todo hubiera quedado grabado en el cerebro?

Qué momentos creemos elegirían nuestros descendientes para mostrar una remembranza de nuestra vida y obra?

Cuáles serían los que se retirarían de la exhibición final? Cuáles se mostrarían???

La película –mal titulada- Más allá de la Muerte- es ante todo una oportunidad para reflexionar respecto a estos temas...y va más allá.

Que tal si no tuviéramos que esperar a nuestra muerte para poder echar un vistazo a esos momentos que de alguna manera nos marcaron, aquellos que se han convertido en el eje de nuestra vida –para bien ó para mal-. Quizá nos sorprenderíamos al darnos cuenta que las cosas no fueron como siempre lo supusimos...”Que ella no se fue por culpa nuestra, que el consejo de nuestros padres fue el adecuado ó que nunca lo debimos haber hseguido...

Una serie de intrínsecos pensamientos correrán en sus mentes al momento de sentarse frente a la vida de Alan, una vida quizá no tan alejada a la de muchos de nosotros.

Ciencia ficción de buenas hechuras, con más de ciencia que de ficción...

miércoles, 20 de abril de 2005

EL MILAGRO BERN (WUSEN DUS VON BERN) / 20.04.05

Ayer viaje nuevamente en el tiempo....

De pronto estaba en el hotel de concentración del equipo Alemán que conquistó el campeonato del mundo de 1954; junto al portero Turek, el capitán Fritz Walter, y Helmut Rahn, ídolo de un pequeño niño alemán de escasos 12 años que lo acompañaba frecuentemente a los entrenamientos.

La historia eje se centra en efecto en los momentos importantes de la selección Germana que obtuvo su primer título Mundial en la ciudad de Berna Suiza en el mencionado año. No obstante se entrelazan un par de pequeñas historias comunes, la de la familia del niño y la de un periodista que de último momento es elegido para cubrir el evento mundialista.

La película logra equilibrar las emociones que van desde los triunfos a las derrotas y de los sentimientos familiares y de pareja de los protagonistas, con suavidad sin llevar a los extremos las situaciones tensas que aparecen a lo largo del film, como cuando el padre de familia castiga al menor y no lo deja terminar de ver el juego.

La recreación de la época es simple y sencillamente maravillosa.

Desde los uniformes de los equipos , los campos de entrenamiento, el viaje en autobús a Munich... sin duda un trabajo excepcional en vestuario y escenarios.

Hay una escena en particular –ya en pleno juego final contra Hungría- en la que se observa un anuncio de Cinzano en un edificio contiguo al pequeño estadio suizo que realmente te llega a transportar al momento...bárbaro!!!!

Una película que no sólo disfrutarán los amantes del fut romántico, sino que les hará pasar un agradable momento a quienes gustan de un cine tranquilo sin mayores pretensiones que la de invertir su dinero en una película entretenida.

Para los que viven y aman el futbol...claro, una cinta de indiscutible valor plástico e histórico.

miércoles, 6 de abril de 2005

KINSEY / 06.04.05

Siempre he sido un admirador de las películas que recrean tiempos idos, me llaman la atención. Y si a esto le agregamos la recreación de toda una época en cuanto a pensamientos, ideales y costumbres , pues resulta ser una buena opción para experimentar.

El tabú del sexo en los años 30’s es tomado en serio –quizá demasiado- por le zoólogo americano Kinsley , llamado por sus alumnos en Indiana Prok.

El famoso taxónomo de la avispa de las agallas se dio cuenta basado en sus experiencias personales que las lecciones sobre el sexo realmente dejaban mucho que desear, eran verdaderamente absurdas y se enfrascó en una carrera sin final respecto al comportamiento sexual del humano.

En base a métodos y usos nunca antes vistos, Alfred C. Kinsey demostró ser un pionero de este tipo de estudios; además sus dos obras publicadas
Comportamiento sexual en el hombre (1948) y Comportamiento sexual en la mujer (1953), llegaron a convertirse en obras de culto entre sus seguidores y desde luego bestsellers del momento.

Como podrá imaginar el amable lector Kinsey tarde o temprano se tuvo que enfrentar a una rígida sociedad que pasado el interés comenzó a cuestionar abiertamente términos “altamente peligrosos”para las nuevas generaciones como homosexualidad, lesbianismo, relaciones extramaritales etc.

La sociedad no estaba aún preparada...lo está ahora? debe de estarlo?


Kinsey, Alfred Charles (1894-1956)


martes, 5 de abril de 2005

ENTRE COPAS / 05.04.05

Creo que el director Alexander Payne es un director-alquimista, que ha encontrado un raro balance entre éxito comercial y credibilidad como artista.
Sin embargo, el conseguir el favor de la crítica y una moderada aceptación por parte del público, no necesariamente significa que sus películas sean muy buenas.
"Election" y "About Schmidt" me parecieron sagaces melodramas que combinaban comedia y tragedia de un modo muy inusual, pero entretenido. Y a pesar de no ser muy accesibles ni como comedias ni como dramas, la experiencia total era suficientemente satisfactoria como para pasar un buen rato con su narrativa, simultáneamente frívola y profunda.
"Entre Copas" es, para bien o para mal, más de lo mismo. El problema es que la fórmula de Payne parece repetirse y ya no es tan fresca o tan satisfactoria.
Tal vez no se repite en los detalles (como argumento o personajes), pero "Entre Copas" definitivamente evoca los mismos temas de depresión, desencanto con la vida, "ennui", y un toque de patética comedia, que nos permite reírnos de los personajes, pero no burlarnos de ellos.
La diferencia es sutil, pero significativa.
"Entre Copas" se centra en Miles (Paul Giamatti) y Jack (Thomas Haden Church), cuarentones amigos desde la universidad. Jack está por casarse, y decide disfrutar sus últimos días como soltero emprendiendo un viaje por las regiones vinícolas de California en compañía de Miles, un gran aficionado al vino que le servirá como guía y compañía. Y como Miles está aún recuperándose de un amargo divorcio, Jack decide que ayudará a su amigo a encontrar romance, o al menos sexo, durante el viaje. Por eso, cuando encuentran a las guapas meseras Maya (Virginia Madsen) y Stephanie (Sandra Oh), parece que el viaje será exitoso... pero entre la depresión de Miles y la falta de sentido común de Jack, surgirán muchas dificultades durante el viaje.
A primera vista puede parecer que "Entre Copas" no tiene realmente una trama definida... y eso es en parte cierto. Durante dos horas vemos las peripecias de Miles y Jack, haciendo el ridículo, consumiendo demasiado vino y peleándose por trivialidades. No es sino hasta la segunda mitad de la cinta cuando el argumento parece enfocarse en Miles y su tímido romance con Maya. Se antoja posible que las inseguridades y depresión de Miles lo han convertido en un alcohólico que disfraza muy bien su enfermedad con un genuino entusiasmo por el vino. Más aún, las enológicamente verosímiles descripciones que Miles hace del vino parecen ajustarse a su propia personalidad y la de Maya, como puede verse en una magnífica escena, donde ambos tratan torpemente de iniciar una relación amorosa, pero terminan hablando de las virtudes de varios licores. Ese y otros breves momentos de la película son excelentes muestras de la sensibilidad del director, creando emociones sin ser sentimental, y profundizando en sus personajes de manera natural y orgánica.
Pero escenas como esas son escasas; la mayor parte del tiempo el guión anda sin rumbo, pasando de burda comedia (como en la ridícula serie de eventos que desencadena una cartera perdida) a patético drama que parece regodearse con la ineptitud social de los personajes. En pequeñas dosis eso puede ser interesante, pero a lo largo de dos horas la trama pierde impulso... y el interés de la audiencia.
Por el lado positivo tenemos las brillantes actuaciones de un elenco conformado por muy buenos, aunque poco conocidos actores. Paul Giamatti merecía en el 2003 toda clase de reconocimientos por "American Splendor", y me alegra que ahora los reciba, aunque sea tardíamente y por una película no tan buena. Thomas Haden Church estuvo encasillado en huecas comedias televisivas ("Ned & Stacy", "Wings") durante muchos años, y es bueno verlo en la pantalla grande, quizás representando el mismo papel de siempre, pero haciéndolo muy bien. Sandra Oh (esposa del director) había estado relegada a minúsculos papeles de "mejor amiga" durante toda su carrera, pero en "Entre Copas" se revela como una diestra actriz con gran presencia. Y finalmente Virginia Madsen regresa con una fantástica actuación, justo cuando su carrera parecía declinar, luego de participar (con muy buenos resultados) en cintas tan diversas como "The Hot Spot" y "Candyman".
Las buenas actuaciones y el melancólico tono de la película bastan para recomendar "Entre Copas", pero con la advertencia de que su pausado ritmo y su serpenteante guión requerirán una dosis extra de paciencia y comprensión. No creo que esta sea la mejor película de Alexander Payne (creo que sigue siendo "Election"), pero es un buen esfuerzo, inexplicablemente aclamado por encima de mejores películas de tema similar que en su momento fueron ignoradas, como “Welcome to the Dollhouse” y “Ghost World”. En fin, supongo que así es Hollywood.