jueves, 12 de octubre de 2017

The Who 12 de Octubre 2016

The Who 
12 de Octubre 2016
Palacio de los Deportes 
Tema por tema...(esta vez es necesario y obligado)

Fotos Juan Carlos Cabrera
Alberto E. Castillo



Para algunos fueron cincuenta, para otros cuarenta años, treinta...de espera.

Los que hayan sido finalmente terminaron y uno de los pilares del rock and roll pudo ser admirado por sus fans, en propia tierra, en México.

Una banda que además había dejado a la raza rockanrolera en plena decepción unos días previos al 17 de Marzo de 2007  cuando cancelaron la que sería su primera tocada. 
Hoy afortunadamente esa fecha ya dejó de estar maldita y quienes guardamos ese ticket lo mantenemos como una simple joya que pudo ser.

Pero el rock and roll es caprichoso y nunca deja de sorprendernos.

Hoy The Who anuncia su gira de despedida y la consciencia parece haberles dictado una tarea impostergable: visitar México, de otra forma no te puedes ir.

Y así fue.

Y quizá muchos de sus fans ya los habían visto en otro país, quizá una o varias veces. Quizá incluso estuvieron en alguno de los conciertos que brindaron para despedirse por vez primera en Octubre de 1982, cuando ya sin Keith Moon y con dos grabaciones finales partieron.

No importa. Verlos en tu patria siempre será especial, como lo escribimos en el previo...

"El día en que podrán sentir en tierra propia las guitarra y voz de una institución solo comparable con las tres joyas de la invasión inglesa. De aquellas faltan los Kinks, pero por lo pronto The Who va a registrar la fecha mas importante para el rock desde la visita de los Rolling Stones y Pink Floyd"' 

Sin duda, la presencia de quien ostentó el record guinness como ¡ la banda mas escandalosa y violenta del planeta¡, era una asignatura cruelmente pendiente para todos y cada uno de nosotros.

El concierto.




Fue en punto de las 21:30 cuando apareció The Who...al fin!

Pero no dudo que desde horas antes ya todo mundo traía sus propios recuerdos , razones, angustias y deseos en carne viva, en carne propia.

El ingreso al domo de cobre, nadie extraña el Foro Sol, tan demandado en los últimos años. 
Pero The Who es para el Palacio, una intimidad que hemos disfrutado con los grandes. 
Scorpions la rompió ahí en el 94, KISS en su gira de reunión en el 97, el Guns y Metallica de los 90, Ozzy elevó ese domo con el decibel del siglo. 
Hoy agradezco que así haya sido.
 
Y por fin aparecieron sobre la tarima. 

Cuando ese par de sencillos ocultos de cualquier álbum de estudio *I Can't Explain  y The Seeker dejaron caer sobre todos nosotros sus espíritus londinenses, explotamos al unísono para comenzar a correr detrás de los frenéticos e históricos iconos, Townshend y Daltrey.
Y lo haríamos desde el principio de los tiempos, cubriendo eras y ciclos clave de su historia.

Con 'Who are You comenzaron los himnos.
1978 y la recta directa a esa época en la que Pete Townshend abusaba como sólo él lo podía hacer de los sintetizadores y cajas de ritmo. 
En la pantalla Keith Moon, imposible declinar su importancia en este su último plato grabado con la banda. 
Los coros del Palacio me estremecen, es el primer gran tema del coloso.

De vuelta a Londres, dándole la espalda al Big Ben, a Liverpool, en el mejor de los sentidos

The Kids are Alright y My Generation de las mas requeridas en los años 60.
Si hablas de una primera apuesta fuerte y robusta de Beatles o Rolling Stones, *The Who Signs My Generation la puede doblar desde muchos ángulos.



Obras que dieron forma al tesoro en que se convertirían los Who.
Para 'I Can't See for Miles estamos ciertos de que tenemos enfrente a la banda mas avanzada de su tiempo con un verdadero concepto en escena y en el estudio de grabación. Este tema del *Who Sell Out fue de los que mas disfruté.

"A veces pienso que somos la única banda que realmente entiende el concepto del Rock" dijo alguna vez Pete Townshend. 

Bien, lo que estamos viendo y escuchando es precisamente eso. 
Una fórmula que define perfectamente lo que es el rock and roll. 

Y si lo que escuchamos procede del milenario *Who's Next, es tiempo de traslados a tierras en las que solamente Led Zeppellin 4, Aqualung, Fragile o Dark Side of the Moon pueden convivir. No hay mas.

Del brutal hemisferio iluminado del célebre cuarteto surge Behind Blue Eyes y Bargain un primer par de la colección del mejor disco de rock registrado en la caja  de los setenta y quizá de todos los tiempos.
Y no, no es conceptual, aunque nació de un concepto que nunca vio la luz.

*Join Together de la pluma de Townshend está listo para llevarnos al temporal de los setenta. Por alguna razón pienso en Lennon, pienso en los conciertos organizados por Harrison en el Madison Square Garden para mirar al continente Africano, pienso en Imagine, en Something. Los sentimientos que nos atacan desde la tarima son algo único.

Comienzan a escucharse sintetizadores, el indescriptible uso de ellos en 1980 solo nos pueden llevar a un momento. 
Al momento en que  por vez primera escuché a The Who en la radio.
Héctor Lama de Radio Hits la anunció alguna tarde y sin saberlo se me extendía una invitación para subirme a la historia de la banda. 
Es Face Dances, es You Better You Bet. 
Vuelvo a escucharla, pero esta vez es algo indescriptible. Sólo en México he percibido tal respeto por esa rola, sólo esta noche. 
Pienso en Kenny Jones por supuesto.
Salve la Radio de los 70 y 80.

Tommy y Quadrophenia.

The Who no sería lo que es sin el certificado de Opera Rock patentado en su nombre.
En 1969  desde un semillero de guitarras y batería fundaba una de las obras clave del rock, Tommy.
Estructuras que llegaron hasta nosotros, en cortes unidos por la nostalgia de los tiempos en que se conquistaron.
En esta cronología de forma inversa comenzamos con Q (5:15, I'm One, The Rock, Lv R O'er Me).
Un lujo para todos.
Sonidos y costumbres que se acercaron a los toques emblemáticos de las puestas en escena mas fastuosas de los 70, hoy con una reproducción fantástica de los instrumentos.
A estas alturas Keith Moon y John Entwistle se han materializado en Zack Satrkey y Pino Palladino. 
El hijo de Ringo Star hace maniobras horizontales sobre los tombs. 
Redobles interminables, única forma de entender el ritmo de cada uno de los temas de The Who. 
Sobre él pesan todos los símbolos de mitología que se han erigido desde 1978 en torno a Keith Moon, un espíritu glorioso que cena junto a John Bonham todas las noches en que se nos ocurre evocarlo.
Zak lo sabe y lo honra con un ritmo sólido, perfecto de quien lo aprendió en vida.

Para el bajo, ese instrumento que no no miras pero jamás dejas de sentir. 
Ser heredero del sonido de Entwistle no es fácil, debes ser algo mas que un lector del pentagrama.
Palladino sabe que no va a lograrlo de ninguna manera, Entwistle fue el mejor bajista de la historia.
Llevemos el instrumento al mejor nivel del ser humano, y dejemos que los dioses mantengan escrita su leyenda.

Daltrey apunta su micrófono hacia el horizonte en el que finaliza con decoro e intensidad ese final apoteósico de Love Reign. Obra monumental.

Avanzamos en forma inversa hacia T (Amazing Journey, Sparks, The Acid Queen, Pinball Wizard, See me, Feel me)

Los cortes elegidos para Tommy son precisos y gracias a la fuerza propia de su esencia pudieron hilar una continuidad que los puristas suelen criticar. 
Son obras que deben ser interpretadas por completo, nadie lo puede negar. 
El material de cualquier forma es noble para interpretarse con intermedios mentales y pausas simbólicas.
Esta serie de mosaicos nos lleva irremediablemente a uno de esos intermedios de la obra: *Pinball Wizard.
El tema es desde luego uno de las cimas de las cordilleras a través de las cuales vamos rompiendo la maldición. 

A la mente la actuación de Woodstock y desde luego la anécdota de la desafortunada presencia de Abbie Hoffman a quien Pete le estrelló su guitarra en el cráneo ; y la despedida en aquel atardecer del festival en la figura final de We're Not Gonna Take it, *See me, Feel me, en la poderosa voz Daltrey.

La noche en el Palacio de los Deportes prevé un cierre estruendoso en manos de The Who.

Baba O Riley, irrepetible momento en el que pudimos finalmente escucharla en escenario nacional.

Locura, llanto, nostalgia.
Todos los sentimientos que abarca el legendario Who's Next en cinco minutos que tardaron medio siglo en conformarse para los fans, para aquellos vivos y para otros acaecidos que en su recuerdo cimbraron el domo de cobre.

Uno de un perfecto par de temas que comienza a cerrar el ciclo, uno que estaba abierto, y una herida punzante que se mantenía abierta desde hace nueve años.

El otro par a corta distancia , 'Won't Get Fooled Again.

Una revolución que hoy triunfa.
Ningún fan ha esperado tanto por grupo alguno.
Nos miramos unos a otros mientras Zak aporrea los de aire y los de piso, la tarola y nos lleva a imaginar el rostro de Keith Moon y el estilo sin par de Entwistle.
Estamos todos al borde de lo que sea.

Hemos esperado lo suficiente para convertirnos en líderes, en cruzados, en soldados con medallas.

La bandera aun hondea, célebre noche esta.

*Eminence Front nos lleva a un lado del escenario.

La calma de un tornado siempre oculta algo. Ritmo y cadencia que nos llevan de 1980 a 1970 para decir adiós con el poderoso tema Substitute extraído de los mítico 25 minutos del *Live at Leeds.

Inolvidable.



La noche en que finalmente miramos a The Who en Mexico.

Pudo haber sido antes, quizá.

Alguna extraña razón mantuvo a los oriundos del barrio de Shepherd's Bush, en Londres alejados de las tarimas de México. 
Pero con muertes y cancelaciones incluidas no se bajó la guardia.
Una brutal fuerza de los fans mantuvo la llama ardiendo y el milagro se anunció y esta vez nos iluminó por completo.

Y en lo personal creo que nos iluminará algún día nuevamente.

Estás no fueron las últimas palabras....