jueves, 13 de octubre de 2016

DYLAN , LIKE A ROLLING STONE


Nunca como esta noche, la mezcla y fusión de los pilares de la música Rock que tiene sus cimientos en el blues, jazz y desde luego el ritmo bailable que Chuck Berry y El Rey instauraron a fines de los 50`s. Nunca como esta noche...

Dylan nos cautivó con todas esas piedras que edificaron la catedral de la música contemporánea, incluida desde luego la piedra rodante que por un momento pensamos se quedaría en Minnesota, lugar en el cual el Folk de este hombre comenzó a esparcirse a lo largo del mundo, para finalmente aparecer.

De tal forma y frente a nosotros quizá uno de los tres íconos más poderosos en vida de este movimiento rockanrolero, Beatles, Stones y Bob... No hay más. Y si a ello agregamos que Dylan influenció a los primeros dos , a los segundos (Clapton, Beck) a los terceros (Zeppelín , Purple) entenderemos de lo que se trataba esta noche.

Como bien lo apuntó Paco, no era una velada para seguir al pié de la letra un set list o ir anotando en la memoria cuantos hits se tocarían. Quien llegó con esa idea seguramente salió confundido, quizá hasta decepcionado. La noche por el contrario era para ataviarse y embriagarse de acordes, frases y sensaciones, de la presencia de un hombre que representa mucho, un verdadero líder espiritual del movimiento.

Por ello la música incluso era sólo el pretexto para entender lo que ahí estaba ocurriendo.

Al final, casi al final, Like a Rolling Stone , no hay mejor metáfora de lo que para muchos representa el rock, la libertad , el correr de un lado hacia otro sin sentirse pertenecido más que a la música, lo demás cambia, viene y va, pero el rock sigue ahí, leal.

La verdad nunca pensé ver a Dylan, por lo que nuevamente hay que agradecer a los Dioses del Olimpo rockanrolero, en el que George Harrison y Roy Orbison estoy seguro abogaron en primer término para hacer realidad el sueño.

A partir de esta noche la foto que tengo en un libro, Dylan junto a la grandiosa Joan Baez tiene otro significado...
Long live to Dylan...long live to Rock and Roll.