"Nosotros te elegimos..."
Unas vías del tren están por llevar a Saroo a una dimensión que en su mente infantil nunca imaginó.
Cada durmiente recorrido lo traslada a años luz de su familia, de su entorno, de su tierra, de su humilde origen para encaminarlo a las puertas de una oscuridad, de una pobreza de la que tendrá que escapar de alguna forma.
Es Lion una épica historia en que las caras de la moneda no parecen caer parejo para Saroo y Calcuta, la tierra que finalmente sorbe su humanidad y la impregna de pobreza. Un orfanato, hambre e inconcebible infortunio.
Una vida extraviada que encontrará la luz al final del túnel.
Una tenue mirada que le irá mostrando un nuevo mundo alejado de ese rincón olvidado en la India para situarlo en las costas de Australia bajo renovados aires.
Es Lion una beldad en nuestros tiempos, una cinta memorable que toma los mejores lienzos de otras notables del calibre de Cometas en el Cielo y la Llave de Sarah; conmueve como aquellas, interesa en grado sumo e incursiona con intelectiva el alma de los personajes.
En la devoción de Sue encarnada de forma extraordinaria por Nicole Kidman que ante los pesares ofrece el amor por igual a Saroo y a Mantosh.
En las almas perdidas que se quedaron atrapadas en la nocturna y abandonada estación del tren, en el aroma del carbón que yace en sus espaldas, en las culpa que cubrió de arrugas el rostro de Kamla; en la noche en que los segundos se detuvieron para ellos.
Nombres que se entrelazan en su desarrollo y despiden profundos sentimientos.
Y el túnel en el que se internaron Saroo y Guduu se desplegará por muchos años en el futuro antes de volver a mirar un claro en el horizonte.
1 comentario:
Llore toda la cinta
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