U2 (los conciertos)
Con más de un cuarto de siglo desde su primer L.P., U2 regresó a México después de prácticamente 8 años de ausencia para seguir demostrando que los ideales vertidos en Live Aid hace 20 años bajo su himno Sunday Bloody Sunday, sino intactos, fueron lo suficientemente atractivos para capturar la atención de una generación que nació, creció y sólo el tiempo dirá, morirá con ellos o le alcanzará para heredar a futuros músicos su propuesta.
Como sea 120 mil personas estuvimos ahí, en el majestuoso Estadio Azteca mismo que a 40 años de inauguración finalmente encontró al grupo rockanrolero que hiciera gala de su historia.
Unos por primera vez estaríamos checando al grupo en directo, en donde de acuerdo a Robert Plant se debería de calificar siempre a una verdadera banda de Rock. “de otra forma tu opinión siempre estará incompleta...”
Por ello desde que se anunció su presentación me animé a colarme entre sus fans, a respirar un poco de este fenómeno que no había tenido oportunidad de atender en las pasadas dos visitas. Y así logré conseguir los boletos en forma y recorrí su discografía desde esa trilogía producida por Steve Lillywhite, misma que ya desde los ochenta me había mostrado buenas cosas bajo el nombre de Boy, October y el estimado War, del que esperaba escuchar los que me parecen ser los temas más fantásticos –digamos mis favoritos- de la banda-Sunday....y New Year Day.
De cualquier forma me adentré en las demás grabaciones pasando desde luego por el otro nivel alcanzado en The Joshua Tree (con Brian Eno y Daniel Lanois en la mesa de control), álbum clave de su discografía, y la densidad del Acthung Baby.
Al escuchar lo que salía de los demás me quedó claro que en los 90´s U2 era lo suficientemente importante como para explorar ritmos tecnho, sonidos ambientales y demás tecnologías y encima pasársela bien...
Con esas discretas bases me metí al Azteca el 15 de febrero....
El concierto.
Siempre he pensado que los conciertos de estadio pueden llegar a ser armas de dos filos.
Son muy atractivos para los lentes de las cámaras con grandes angulares, para confirmar la teoría de la pirámide invertida (en donde la fuerza viene del centro, pero suelen sacrificar el aspecto musical desde el punto de vista auditivo/ acústico por supuesto.
Por ello desde que se anunció que sería el Azteca no había otro objetivo, estar en la cancha. Ahí se respira el aura de lo que ha hecho legendarias las tocadas más celebres desde que los Beatles pisaron suelo americano a principio de los 60´s.
De tal forma alcancé el preciado boleto y 3 meses después me introduje en el túnel #12 para comenzar a descender hasta apreciar una cancha cubierta de blanco, (sin sillas afortunadamente) y poco a poco observar el espectacular montaje de la banda que si bien habíamos visto en fotografías, no dejaba de ser más llamativo en vivo.
La tensión se sentía en el ambiente de los seguidores quienes al más puro estilo de festivales tipo Live Aid , Mounsters of Rock, Rock in Rio, departían la antesala del evento, de pié, en flor de loto ó de plano recostados leyendo el programa de a 100 pesos que se conseguía en los puestos al estilo gabacho colocado en puntos estratégicos del Estadio. Las luces del estadio para eso de las 7 de la tarde se prendieron dejando ver el espectáculo aparte que seguramente iba a ofrecer la audiencia de gradas bajas y superiores, comenzando por la memorable OLA 86.
A las 8 en punto se apagaron las luces y “Las Máquinas Secretas” comenzaron el ritual del telonero. Una banda densa, proclive a la experimentación y quizá no tanto a la fase del grupo abridor que tiene por misión calentar el ambiente, algo que generalmente nunca sucede. 45 minutos y finalizaron, un par de buenos temas...
La luces del estadio se volvieron a prender dejando ver un Azteca completamente a tope en las secciones vendidas con la excepción del lado Sur. Tiempo para ir por una cerveza, quizá fumar el último cigarrillo, echar el telefonazo a la persona que no pudo ó quiso ir y que de última hora se convirtió en fan, o a la que se sentía frustrada con su lugar de $2,500 desde el que no veía NADA..”!!!Toma tus dos quinientos...!!!! alcancé a escuchar a unos regiomontanos en plena burla hacia los perdedores de las filas más lamentables.
U2
A las 9:20 los últimos detalles habían sido apuntalados por el equipo de apoyo, todos esperábamos que las luces se apagaran, cuando de pronto (algo que en el primer concierto no alcancé a observar) los 4 integrantes comenzaron a bajar por rampas desde la tribuna sur hacia el back stage, enmarcados por el intro del grupo Arcade Fire (Wake up) La reacción del público fue espectacular, miles de gargantas al unísono se hicieron escuchar.
La luces del coloso se apagaron y el escenario dejó ver finalmente esa especie de mamparas del futuro que iluminaban el stage de forma tal que de inmediato nos sentimos atrapados por los halos de luz nacidos de su interior. Impactante!
La espera había terminado para miles...por lo que había que disfrutar el momento.
Así llegó el tema abridor...
Mexico City of Blinding Light.....
Un tema espectacular para un inicio espectacular...más que la misma Vértigo. Luces , cámara . acción....
U2 iniciaba así la serie de temas que conformarían la noche. Difícilmente algún tema dejaría de corearse en cascada desde lo más alto del coloso y hasta los privilegiados que tocaban las rampas sobre las que los 4 integrantes tuvieron ocasión de recorrer.
Desde el Hello! Hello, I´m at place call Vertigo...el teme de gira, y hasta la Miss Sarajevo, a la que Bono le agregó medidas de alto rango como posible tributo a Luciano Pavarotti.
Temas que seguramente pudieron hacernos recordar pasajes de nuestra adolescencia; quizá lo hizo Adam Clayton al momento de comenzar a liderear con el bajo New Year Day , ó Mullen Jr. Al emprender el viaje a Dublin con Sunday Bloody Sunday...quizá como sucedió, se era más afín a mensaje de los himnos Street Have not Name ó la nombrada más popular en México, With or Without You adornada por ese juego de luces tan especial de lo encendedores, espectáculo a parte junto con el océano cósmico de celulares en vela. WOW ¡
Olvidándose de sus detractores la figura de Bono sigue siendo la más reconocida del cuarteto ya sea en su vida dentro o fuera de la banda. Su voz exterior quizá haya sufrido los estragos del tiempo, pero la interior ha rebasado barrera físicas y espirituales. El mensaje está ahí, en One ó en la coexistencia de la libertad de credo, en Pride, ó la fuerza de identidad en original of the species
Todos los temas de alguna u otra manera bien documentados en imágenes en directa ó indirecta postura. Desde la declaración universal de los derechos humanos, el virtual patio central de la ONU –banderas desplegadas para los menos creativos-, ó la solitaria figura de un hombre de traje definida como el padre de Bono, en la emotiva Sometimes you can´t make it on your own.
En mayor o menor medida el grupo ofrecía al público lo que tenía, lo que lo ha hecho el espectáculo musical más demandado de la actualidad. Había que seguirlo de cerca.
El final se acercaba, el par de encore daban pauta a que una joven subiera al escenario a bailar (primer concierto) ó a cantar (segundo); tiempo para cantar el cielito lindo ó el Rey, la melodía desencadenada de los Righteous Brothers y hasta reverencia al cuarteto de Liverpool. Extractos acústicos para la maravillosa Yahweh, y la cálida Stuck in a moment , en primero y segundo concierto respectivamente, con el público en franco delirio.
Cerca de las 11:30 Larry Mullen se quedaba solitario en el escenario dando ritmo a al último tema que se toco en las dos noches, 40 del War.
Finales.
Espoleados por los ideales del punk hace más de 25 años, U2 recorrió a lo largo de más de dos hora su historia. Misma que comenzó cuando el mundo era otro y no el de hoy “del que nadie habla de bombas atómicas ó si???.. Quizá de armas de destrucción masiva”. Bono
Una paradoja interesante, de la que finalmente U2 sale avante gracias a la mezcla de la que esta hecha la banda, la fusión de las texturas de la guitarra de The Edge a una sección rítmica y la personalidad de Bono.
La noche de U2 en México dejó esa idea, la fantasía de un increíble espectáculo, constancia de la consistencia de una trabajo de años bien elaborado y equilibrado.
Quizá en la misma mampara de cristal estuvo siempre la respuesta .....(ver foto)
Songs Human Voice
Ac
Con más de un cuarto de siglo desde su primer L.P., U2 regresó a México después de prácticamente 8 años de ausencia para seguir demostrando que los ideales vertidos en Live Aid hace 20 años bajo su himno Sunday Bloody Sunday, sino intactos, fueron lo suficientemente atractivos para capturar la atención de una generación que nació, creció y sólo el tiempo dirá, morirá con ellos o le alcanzará para heredar a futuros músicos su propuesta.
Como sea 120 mil personas estuvimos ahí, en el majestuoso Estadio Azteca mismo que a 40 años de inauguración finalmente encontró al grupo rockanrolero que hiciera gala de su historia.
Unos por primera vez estaríamos checando al grupo en directo, en donde de acuerdo a Robert Plant se debería de calificar siempre a una verdadera banda de Rock. “de otra forma tu opinión siempre estará incompleta...”
Por ello desde que se anunció su presentación me animé a colarme entre sus fans, a respirar un poco de este fenómeno que no había tenido oportunidad de atender en las pasadas dos visitas. Y así logré conseguir los boletos en forma y recorrí su discografía desde esa trilogía producida por Steve Lillywhite, misma que ya desde los ochenta me había mostrado buenas cosas bajo el nombre de Boy, October y el estimado War, del que esperaba escuchar los que me parecen ser los temas más fantásticos –digamos mis favoritos- de la banda-Sunday....y New Year Day.
De cualquier forma me adentré en las demás grabaciones pasando desde luego por el otro nivel alcanzado en The Joshua Tree (con Brian Eno y Daniel Lanois en la mesa de control), álbum clave de su discografía, y la densidad del Acthung Baby.
Al escuchar lo que salía de los demás me quedó claro que en los 90´s U2 era lo suficientemente importante como para explorar ritmos tecnho, sonidos ambientales y demás tecnologías y encima pasársela bien...
Con esas discretas bases me metí al Azteca el 15 de febrero....
El concierto.
Siempre he pensado que los conciertos de estadio pueden llegar a ser armas de dos filos.
Son muy atractivos para los lentes de las cámaras con grandes angulares, para confirmar la teoría de la pirámide invertida (en donde la fuerza viene del centro, pero suelen sacrificar el aspecto musical desde el punto de vista auditivo/ acústico por supuesto.
Por ello desde que se anunció que sería el Azteca no había otro objetivo, estar en la cancha. Ahí se respira el aura de lo que ha hecho legendarias las tocadas más celebres desde que los Beatles pisaron suelo americano a principio de los 60´s.
De tal forma alcancé el preciado boleto y 3 meses después me introduje en el túnel #12 para comenzar a descender hasta apreciar una cancha cubierta de blanco, (sin sillas afortunadamente) y poco a poco observar el espectacular montaje de la banda que si bien habíamos visto en fotografías, no dejaba de ser más llamativo en vivo.
La tensión se sentía en el ambiente de los seguidores quienes al más puro estilo de festivales tipo Live Aid , Mounsters of Rock, Rock in Rio, departían la antesala del evento, de pié, en flor de loto ó de plano recostados leyendo el programa de a 100 pesos que se conseguía en los puestos al estilo gabacho colocado en puntos estratégicos del Estadio. Las luces del estadio para eso de las 7 de la tarde se prendieron dejando ver el espectáculo aparte que seguramente iba a ofrecer la audiencia de gradas bajas y superiores, comenzando por la memorable OLA 86.
A las 8 en punto se apagaron las luces y “Las Máquinas Secretas” comenzaron el ritual del telonero. Una banda densa, proclive a la experimentación y quizá no tanto a la fase del grupo abridor que tiene por misión calentar el ambiente, algo que generalmente nunca sucede. 45 minutos y finalizaron, un par de buenos temas...
La luces del estadio se volvieron a prender dejando ver un Azteca completamente a tope en las secciones vendidas con la excepción del lado Sur. Tiempo para ir por una cerveza, quizá fumar el último cigarrillo, echar el telefonazo a la persona que no pudo ó quiso ir y que de última hora se convirtió en fan, o a la que se sentía frustrada con su lugar de $2,500 desde el que no veía NADA..”!!!Toma tus dos quinientos...!!!! alcancé a escuchar a unos regiomontanos en plena burla hacia los perdedores de las filas más lamentables.
U2
A las 9:20 los últimos detalles habían sido apuntalados por el equipo de apoyo, todos esperábamos que las luces se apagaran, cuando de pronto (algo que en el primer concierto no alcancé a observar) los 4 integrantes comenzaron a bajar por rampas desde la tribuna sur hacia el back stage, enmarcados por el intro del grupo Arcade Fire (Wake up) La reacción del público fue espectacular, miles de gargantas al unísono se hicieron escuchar.
La luces del coloso se apagaron y el escenario dejó ver finalmente esa especie de mamparas del futuro que iluminaban el stage de forma tal que de inmediato nos sentimos atrapados por los halos de luz nacidos de su interior. Impactante!
La espera había terminado para miles...por lo que había que disfrutar el momento.
Así llegó el tema abridor...
Mexico City of Blinding Light.....
Un tema espectacular para un inicio espectacular...más que la misma Vértigo. Luces , cámara . acción....
U2 iniciaba así la serie de temas que conformarían la noche. Difícilmente algún tema dejaría de corearse en cascada desde lo más alto del coloso y hasta los privilegiados que tocaban las rampas sobre las que los 4 integrantes tuvieron ocasión de recorrer.
Desde el Hello! Hello, I´m at place call Vertigo...el teme de gira, y hasta la Miss Sarajevo, a la que Bono le agregó medidas de alto rango como posible tributo a Luciano Pavarotti.
Temas que seguramente pudieron hacernos recordar pasajes de nuestra adolescencia; quizá lo hizo Adam Clayton al momento de comenzar a liderear con el bajo New Year Day , ó Mullen Jr. Al emprender el viaje a Dublin con Sunday Bloody Sunday...quizá como sucedió, se era más afín a mensaje de los himnos Street Have not Name ó la nombrada más popular en México, With or Without You adornada por ese juego de luces tan especial de lo encendedores, espectáculo a parte junto con el océano cósmico de celulares en vela. WOW ¡
Olvidándose de sus detractores la figura de Bono sigue siendo la más reconocida del cuarteto ya sea en su vida dentro o fuera de la banda. Su voz exterior quizá haya sufrido los estragos del tiempo, pero la interior ha rebasado barrera físicas y espirituales. El mensaje está ahí, en One ó en la coexistencia de la libertad de credo, en Pride, ó la fuerza de identidad en original of the species
Todos los temas de alguna u otra manera bien documentados en imágenes en directa ó indirecta postura. Desde la declaración universal de los derechos humanos, el virtual patio central de la ONU –banderas desplegadas para los menos creativos-, ó la solitaria figura de un hombre de traje definida como el padre de Bono, en la emotiva Sometimes you can´t make it on your own.
En mayor o menor medida el grupo ofrecía al público lo que tenía, lo que lo ha hecho el espectáculo musical más demandado de la actualidad. Había que seguirlo de cerca.
El final se acercaba, el par de encore daban pauta a que una joven subiera al escenario a bailar (primer concierto) ó a cantar (segundo); tiempo para cantar el cielito lindo ó el Rey, la melodía desencadenada de los Righteous Brothers y hasta reverencia al cuarteto de Liverpool. Extractos acústicos para la maravillosa Yahweh, y la cálida Stuck in a moment , en primero y segundo concierto respectivamente, con el público en franco delirio.
Cerca de las 11:30 Larry Mullen se quedaba solitario en el escenario dando ritmo a al último tema que se toco en las dos noches, 40 del War.
Finales.
Espoleados por los ideales del punk hace más de 25 años, U2 recorrió a lo largo de más de dos hora su historia. Misma que comenzó cuando el mundo era otro y no el de hoy “del que nadie habla de bombas atómicas ó si???.. Quizá de armas de destrucción masiva”. Bono
Una paradoja interesante, de la que finalmente U2 sale avante gracias a la mezcla de la que esta hecha la banda, la fusión de las texturas de la guitarra de The Edge a una sección rítmica y la personalidad de Bono.
La noche de U2 en México dejó esa idea, la fantasía de un increíble espectáculo, constancia de la consistencia de una trabajo de años bien elaborado y equilibrado.
Quizá en la misma mampara de cristal estuvo siempre la respuesta .....(ver foto)
Songs Human Voice
Ac
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